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Hoy me gustaría iniciar una labor de recapitulación de los temas que hasta ahora hemos tratado en este blog. Ya que los posts publicados de...

viernes, 1 de octubre de 2010

Sobre la fase de superación de barreras para la implementación de ideas disruptivas


Alejandro combate contra el rey persa Darío III en la batalla de Issos (Source Wikipedia)
Hoy vamos a completar esta serie de posts que iniciamos hace ya unos días en la que estamos describiendo maneras de convertir ideas que en principio resultaban de difícil implantación en innovaciones exitosas. Abordaremos la fase de ataque final a los problemas que presentan las ideas seleccionadas para que puedan ser efectivamente implementadas.

Como ya hemos comentado anteriormente, el trabajo en equipo y la buena gestión del mismo es clave a lo largo de todas las fases del proceso para poder alcanzar los resultados esperados, es decir para poder tener un conjunto de soluciones innovadoras implementables mediante un plan de acción concreto.

En los diferentes posts hemos descrito la importancia de trabajar con un equipo suficientemente heterogéneo en la fase de generación de ideas para obtener soluciones con un valor diferenciador respecto a las ya existentes. Hemos visto también, mediante el proceso de positivación de las ideas, de qué manera podemos enriquecer la idea y motivar a un equipo para hacer que posibles soluciones que en principio podían ser vistas como propiedad de la persona que las generó pasen a ser propiedad del grupo. También Hemos hablado del papel clave de los distintos roles en el equipo para que exista un ambiente propicio para el trabajo en grupo y hemos abordado la importancia de la designación de un receptor/propietario de la solución que guíe la búsqueda de la solución y responda a las preguntas que se puedan plantear.

Por lo tanto en esta última fase del proceso nos encontramos con un grupo de potenciales soluciones seleccionadas como innovadoras y seleccionadas por su alto nivel de intriga, por corazonada o, por decirlo de otra manera, por el "feeling" que despiertan más que por su viabilidad de implantación. A este grupo de ideas le hemos aplicado el proceso de positivación grupal que descrito con anterioridad y por lo tanto se dispone en este punto del proceso de un conjunto de ideas enriquecidas con los puntos de vista de todo el grupo y con sentimiento de propiedad de las mismas por parte de él.

Pero, no todo van a ser puntos positivos. No todo va a ser un camino fácil de recorrer, nunca es así salvo en las películas. Es en este momento del proceso cuando nos encontramos con los inevitables problemas de la selección hecha con el corazón más que con la razón. En este momento el/los propietario/s de la solución, es decir la persona o personas que ha seleccionado un grupo de ideas entre muchas guiados por ese “feeling”, tienen que empezar a desgranar cuáles son los inconvenientes que encuentran a la implementación. Es más, deben proceder a realizar una lista priorizada por orden de importancia de los principales factores bloqueantes que pueden hacer la solución inviable. Se puede observar como al realizar esta lista tendremos unas cuantas cuestiones clave que si se logran solucionar desbloquearán el resto casi de manera automática. Podemos poner como ejemplo el de una solución identificada como clave para el negocio que puede ser difícil de financiar internamente en la compañía, y que por lo tanto a priori será complicada llevarla ni siquiera a presentarla al consejo de dirección. Vemos así que estas barreras están compuestas principalmente por un problema clave que forma el nudo gordiano de la solución y unos problemas asociados y dependientes jerárquicamente del primero. Para llegar a una solución final deberemos de proceder a romper este nudo, utilizando la inteligencia como espada, para que el resto de problemas asociados se vuelvan abordables.

Pero ¿De qué manera afrontar esta tarea? La respuesta está en el grupo y en la recursividad del proceso expuesto. Una vez identificado el problema hay que proceder a trabajar nuevamente en grupo para darle solución. Cual cirujano experto hemos llegado a entrar mediante cortes precisos en el cuerpo de la solución y hemos hallado dónde se encontraba el problema principal. Ahora como científicos procederemos a encontrarle solución. Propondremos buscar caminos alternativos que permitan llegar a una solución implementable y al plan de acción concreto.

Con el ejemplo expuesto sobre el problema de la financiación de la solución, ¿Qué tal si recurrimos a fuentes externas de financiación? ¿Qué tal si exploramos la manera de pedir ayudas a la administración? ¿Qué tal si sondeamos las posibilidades de financiación de nuestra idea hablando con dichos organismos públicos? Como vemos, lo que anteriormente encontrábamos como un problema de difícil solución empieza a tener visos de tener viabilidad. Las ideas del grupo darán una nueva perspectiva al propietario del problema y este irá viendo la viabilidad de las sugerencias. 

Al final del proceso estas ideas se plasmarán en un plan concreto de acción en el que detallaremos la persona que debe realizar la tarea y fecha concreta. Esto es especialmente importante puesto que sin este plan de acción no tendremos una hoja de ruta que ayude a implementar esas ideas. 

Llegamos al final de esta serie de posts sobre la manera en que mediante el trabajo en grupo, distribución apropiada de roles, búsqueda de soluciones basadas más en la irracionalidad que en la racionalidad podemos refinar ideas potencialmente innovadoras y aterrizarlas en el mundo real de la implementación.